Gracias a su tecnología de ruido blanco, que alcanza hasta 102 dB, este avisador de marcha atrás sonoro le garantizará a usted y a su entorno una seguridad óptima a la hora de hacer marcha atrás.
¿Qué es el ruido blanco?
Al contrario de los avisadores sonoros clásicos, que tienen unos tonos muy agudos, la tecnología de ruido blanco emite un sonido con una amplia banda de frecuencias que permite localizar inmediatamente el vehículo en el que se encuentra. Permite entonces garantizar mejor la seguridad alrededor de la maniobra reduciendo al mismo tiempo las molestias sonoras para los vecinos.
¿Cuáles son las ventajas de nuestro avisador de marcha atrás de ruido blanco?
- Una mejor distinción sonora del avisador de marcha atrás aunque haya ruido alrededor
- Una ubicación sencilla de la fuente sonora (distancia y dirección), sobre todo cuando hay varios vehículos equipados en la obra
- Menos cansancio auditivo para los usuarios
- Cierta contribución a la reducción de la contaminación sonora
¿Cómo se debe instalar el avisador de marcha atrás?
Asegúrese de que el vehículo esté equipado con una corriente continua de 12-60 voltios y de una señal de marcha atrás. Idealmente, la conexión se realizará a la luz de marcha atrás. Conecte simplemente el cable rojo a la alimentación de la luz de marcha atrás y el cable negro a la masa. Después, fije con tornillos la alarma de marcha atrás en el exterior del vehículo hacia la parte trasera.
¿Por qué instalar una alarma de marcha atrás en mi máquina?
Ampliamente utilizada en el ámbito de las obras públicas, esta alarma, que es muy fácil de instalar, permite avisar a los peatones, vehículos u otros de los peligros que podrían encontrarse en su trayectoria. Gracias a sus 102 decibelios y su ruido blanco, garantizará la seguridad de su entorno. Puede instalarla tanto en una máquina de obra como en un tractor para garantizar la seguridad de las maniobras fuera del campo.
